Enlistar las características del servidor público sería interminable, sin embargo, podrás tener un claro perfil de lo que representa una persona al servicio de la sociedad, un servidor público debe estar orientado a dar un servicio de calidad, atendiendo las necesidades de los ciudadanos del país, capacitándose continuamente con el fin de contribuir al desarrollo de la nación y siendo su principal deseo servir y atender a la comunidad.

El auténtico servidor público busca una mejora continua para brindar la mejor atención y calidad de servicio, su vocación es proporcionar satisfacción a quienes requieran de su orientación y apoyo, apegándose en todo tiempo a valores éticos. Debe tener una educación continua porque al estar abierto al aprendizaje de nuevos conocimientos podrá ofrecer mejores oportunidades a los planteamientos de los usuarios y mejorar la capacidad de servicio.

El servidor público tiene como compromiso entender y atender las necesidades de aquellos que solicitan sus servicios en forma cordial, eficiente, eficaz con la finalidad de satisfacer y superar sus expectativas; guardar secreto profesional, ser ejemplo de responsabilidad, puntualidad, honestidad y ser líder en lo que hace, motivando a sus compañeros a cumplir con las metas propuestas trabajando en forma colaborativa.

Asimismo, el servidor público debe actuar sobre las bases de la justicia, la razón y la argumentación por encima de cualquier interés personal, su desempeño se dirige al bien colectivo, para esto debe tener creatividad e innovación, que se traduce en la búsqueda constante de nuevas formas de trabajo que resuelvan con eficiencia los problemas que en forma cotidiana se van presentando, con una visión de reto frente a cada problema que se le presente y enfocándose en su solución.

Se logra concluir que el servidor público tomador de decisiones debe ser un ciudadano comprometido con el proyecto de su país, un rasgo fundamental es el de tener responsabilidad entendiendo ésta como la máxima identificación del ciudadano con la comunidad, responder cabalmente a este principio de responsabilidad es consecuencia lógica del compromiso de todo servidor público.

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