Esta actividad no se califica, sin embargo, se sugiere su realización para desarrollar la actividad integradora.
Recuerda que en este proceso de aprendizaje autogestivo prima el sentido de responsabilidad, pues tú eres su principal regulador.
Por una parte, el contrato colectivo de trabajo surge como resultado de la constante lucha de la clase trabajadora para tener injerencia en la determinación de las condiciones laborales a regir dentro de una empresa o establecimiento. Mientras que el contrato-ley es el convenio celebrado entre uno o varios sindicatos de trabajadores y varios patrones, o uno o varios sindicatos de patrones, con objeto de establecer las condiciones a presentar el trabajo en una rama determinada de la industria, y declarado obligatorio en una o varias entidades federativas, zonas económicas o en todo el territorio nacional, conforme al artículo 404 de la LFT.
Ambos contratos satisfacen necesidades entre las relaciones económicas y laborales, pero con la distinción de impactar en distintos niveles; para conocer sus características y distinguirlos, se presenta la siguiente actividad.